LifeLeader articula los atributos que queremos desarrollar en nuestros estudiantes y en nosotros mismos. Es un lenguaje común que nos facilita entendernos y enfoca nuestros esfuerzos. La educación del carácter no es algo para lo que hacemos una pausa en la instrucción, está integrada en todo lo que hacemos.
Los líderes eficaces tienen la capacidad de localizar, procesar y comprender la información para poder emitir juicios sólidos y lograr el éxito.
El proceso de hacer juicios claros y racionales informados por evidencia.
La capacidad de ubicar, evaluar, utilizar y comunicar información de manera eficiente y precisa para lograr un objetivo.
Comprensión de los complejos vínculos sociales, económicos y políticos entre diversas culturas y perspectivas.
Los líderes eficaces tienen la capacidad de establecer confianza, conectarse con diversos grupos de personas, transmitir ideas y superar desafíos.
Trabajar en conjunto con otros en un objetivo compartido identificando problemas colectivamente y creando soluciones.
El proceso de influir en las personas con respecto a las creencias y valores éticos, mientras se mantiene la dignidad y los derechos de los demás.
Alguien que se comunica con una entrega clara y exitosa que es bien recibida y comprendida.
La voluntad de servir los intereses de los demás, independientemente del estado o la oportunidad de obtener beneficios personales.
Un pensador que utiliza la información y los recursos disponibles para lograr una solución a un problema.
La capacidad de comprender las emociones de los demás y de satisfacer las necesidades y preocupaciones de los demás.
Los líderes eficaces administran el tiempo, los recursos y el talento para tener un impacto positivo en su propia vida y en la vida de los demás.
Cumplir con las leyes y reglas, contribuir a la sociedad y participar en los asuntos públicos con sabiduría.
La capacidad de comprender cómo se gana, se administra, se invierte y se gasta el dinero.
El grado en que uno se enfoca en un objetivo en particular y las tareas necesarias para lograr ese objetivo.
La capacidad de recuperarse o adaptarse fácilmente a la desgracia o cambiar con optimismo.
Una percepción clara de la propia personalidad, incluidas las fortalezas, debilidades, pensamientos, creencias, motivaciones y emociones, y cómo las perciben los demás.
Asumir la responsabilidad de la propia conducta y saber cuándo y cómo modificar la conducta para el bienestar de uno mismo y de los demás.